Este Catálogo fue concebido e iniciado en 1959 por D. Tomás Marín Martínez con la posterior colaboración, como codirectores, de D. José Manuel Ruiz Asencio, encargado de las trascripciones y concordancia de los textos, y de D. Klaus Wagner, responsable de la identificación de los libros. El patrocinio corrió a cargo de la Fundación MAPFRE América, proyectándose en principio la publicación, junto al Cabildo Catedral de Sevilla, como una colección de diez tomos. Sin embargo, sólo llegaron a publicarse dos, que abarcaban los 1.200 primeros asientos del índice numeral (precedido de una extensa e interesante introducción), suspendiéndose entonces y quedando así inédita y en diversas fases de desarrollo la mayor parte de la tarea realizada.
Años después, el Cabildo Catedral de Sevilla decidió abordar su continuación, al menos en parte, y todo ello se concretó en el trabajo de revisión e identificación que aquí se presenta y que ha llegado, por nuestra parte, a su fin: la continuación del Catálogo Concordado hasta completar la descripción de los 4.231 libros recogidos en el ya mencionado Registrum B, con el material aportado por D. José Manuel Ruiz Asencio y su equipo.
Hay, sin embargo, algunas novedades relevantes respecto al proyecto anterior. No se continúa con la edición del Catálogo en papel sino exclusivamente a través de una base de datos, con el objetivo de permitir hacer búsquedas a texto completo por cualquier término introducido y por distintos campos, ampliándose así las posibilidades de acceso a la información (antes limitada al número topográfico y al índice de autores y obras anónimas). Este formato, además, facilita el acceso a la información en línea, abriéndose libremente a la consulta de los investigadores de todo el mundo.
La base de datos está estructurada en asientos, correspondientes a cada uno de los 4.231 libros contenidos en el Registrum B, y por su orden, recogido en el primer campo. Le sigue el número de la equivalencia asignado por el propio Hernando para la futura ordenación de sus libros en los años cercanos a su muerte, es decir, la signatura topográfica en la nueva distribución física por materias o ciencias.
A continuación, en el campo de la “Edición”, figura la descripción bibliográfica, con el nombre del autor, título de la obra, lugar y año de impresión en el caso de los impresos, el nombre del impresor y formato del libro. Debajo se consigna la signatura actual del libro si se conserva, bien en la Colombina o formando parte hoy en día de otra biblioteca.
En el campo “Registros” se incluye la transcripción de los textos referidos al libro que se cataloga, extraída literalmente de los repertorios respectivos. A continuación se reseñan las diferentes marcas que hubiese anotado en el ejemplar Hernando Colón y su equipo: signos especiales, número del Registrum, equivalencia, autores, títulos y nota de adquisición. Completa la descripción la cita abreviada de la principal bibliografía sobre esa obra (fundamental a la hora de identificar ediciones en el caso de impresos no conservados), y una serie de puntos de acceso que son novedad con respecto a lo ya publicado con anterioridad: autores, impresores, publicación, lengua, copia y adquisición. Tanto en el caso de los nombres de autores como de impresores/editores, a la forma normalizada se añaden las distintas variantes. Para publicación, copia y adquisición, al nombre de la localidad y país le acompañan las fechas, ciertas o probables.
Todo el material anteriormente publicado ha sido objeto de una nueva revisión para una más atinada identificación de las ediciones, a la luz de la nueva bibliografía publicada y de distintas bases de datos y copias digitales a las que actualmente se tiene acceso en línea. Los impresos descritos en los índices y no identificados en ninguna bibliografía se marcan con asterisco. Si no se ha podido determinar qué edición se corresponde con la información contenida en los repertorios de un ejemplar perdido, las distintas posibilidades se disponen encabezadas por una letra (a,b,c…). Si en la descripción de Hernando Colón se recogen distintas ediciones que él identificó como una sola, todas aparecerán en un mismo asiento precedidas de un número de orden (1,2,3…).
Estas líneas no pueden cerrarse sin mostrar el reconocimiento y gratitud a quienes, de una forma u otra, han ido haciendo posible este proyecto desde sus inicios hasta hoy, comenzando por la labor de patrocinio y difusión de la Fundación Mapfre América. Sirvan también como homenaje a la labor, rigurosa y tantas veces ingrata, que llevó a cabo el equipo de trabajo inicial, con mención especial a sus directores: al P. Tomás Marín, al Prof. Klaus Wagner y al Prof. Ruiz Asencio.
